The Big Borde es muy afortunado por mantener contactos íntimos, por motivos personales y profesionales, con tres portátiles distintos.
El monopolio de Microsoft hace prácticamente indispensable usar Windows al menos en uno de ellos, pues muchas empresas desarrollan software y sobretodo páginas web que no respetan los estándares(link), pero como funcionan se ejecutan bien la mayoría de las veces en Windows y con Internet Explorer, no se molestan en corregirlas para que funcionen correctamente en cualquier navegador bien implementado.
Para uso personal, y para cosas tan íntimas como compilar un kernel(link), crear scripts en bash o tener un servidor de Apache(link), es indispensable usar otro portátil, con linux.
Y, por motivos ultrasecretos e inconfesables, que nada tienen que ver con el iPhone o sus juegos, también tengo que pelearme frecuentemente con un Mac Book y su Mac OS X.
Quiero extenderme largo y tendido, seguramente en otro momento, en las curiosidades de cada uno de estos cacharros. Como adelanto, creo que el ordenador ideal tendría características de estos tres tipos de portátil, pero el mundo, las leyes antimonopolio y los tipos de licencia de software no están aún preparados para ello.
Pero lo que quiero contar hoy es una experiencia altamente desagradable con el portátil tonto de la terna, el Dell con Windows Vista que uso principalmente para trabajar...
Esta mañana tenía que imprimir unos documentos. Como soy así de ordenado, los tenía en un directorio, o una carpeta, como dice Microsoft(link), ordenados alfabéticamente. Aprovecho para recordar a mis amigos de Redmond que para ver el contenido de un directorio se usa el comando dir. Si siguen insistiendo en llamar carpetas a los directorios, podrían añadir el comando carp en español o el fold (de folder) en inglés.
Una vez dentro del directorio donde tengo mis archivos PDF, procedí a seleccionar uno a uno, y en orden, los que quería imprimir. Aprovecho el inciso para comentar que muchas veces me he sentido tentado de luchar porquea los archivos les llamemos ficheros y no archivos. Una vez más, en inglés decimos file, no archive. Pero bueno, aceptamos barco... Lo que no acepto es que se diga abrir un PDF o hacer un PowerPoint. Me niego en círculo, lo correcto es decir un abrir un archivo PDF o hacer un documento de PowerPoint, pero nunca un PDF o un PowerPoint a secas.
Con todos los archivos ya seleccionados, caí en la cuenta de que Windows Vista tiene un precioso botoncito con una impresora dibujada, en la parte superior de la ventana seleccionada.
Así que pensé... Pues le doy al botoncito... Estaba planteándome pulsar la tecla Enter para abrir todos los archivos, e imprimirlos uno a uno. Lo cual me recuerda a otra grandiosa característica de Windows que os invito a probar. En Windows podemos borrar archivos pulsando la tecla Supr. Tras pulsarla, Windows nos pregunta si estamos seguros. Esa pregunta aparece en una ventana con dos opciones, Sí o No. Sí está seleccionado por defecto, así que si pulsamos Enter, se valida la opción Sí y entonces se ejecuta la acción, borrar los archivos en este caso. Pero si somos sólo un poquito rápidos con el teclado, y pulsamos Enter después de pulsar Supr y antes de que se haya pintado la ventana que nos pide la confirmación, Windows abrirá todos los archivos, de uno en uno, llenado el escritorio de instancias de Adobe Reader, Openoffice o Notepad, según los archivos seleccionados. Y después sacará la ventana de confirmación que nos pregunta si estábamos seguros de que queríamos borrarlos... Por supuesto, si luego pretendemos pulsar la opción Sí de esa ventana, Windows nos dice que no puede hacerlo porque los archivos están están en uso.
Pero como iba diciendo, decidí usar el botoncito de Imprimir en vez de abrir todos los archivos e imprimirlos uno a uno. Pensé, algo bueno tendrá Windows Vista...
Y entonces escuché que la impresora comenzaba a imprimir... Esperé unos minutos, ya que tenían que imprimirse unas 40 facturas. Y pensé que en cuanto acabara su trabajo la impresora podría recoger las facturas y guardarlas, con la única duda de si estarían ordenadas de manera ascendente o descendente...
Os prometo que desde esta mañana me sigo preguntando qué cojones de algoritmo ha usado Windows Vista para elegir el orden, o mejor dicho, el desorden usado para imprimir los archivos que yo había seleccionado de uno en uno y en orden ascendente...
Porque doy fe de que no salieron ni dos de las facturas en orden consecutivo. Después de la 35 salió la 13, luego la 36, pero inmediatamente después la 1 y luego la 34. La 20 y la 21 estaban separadas por la 8 y la 7, en ese orden, y la 10 apareció entre la 14 y la 13...
Tuve que coger todas y volverlas a ordenar usando un algoritmo de burbuja simple, mientras me cagaba, con perdón, en el jodido programador que implementó el bucle que lee los ficheros seleccionados en el Explorer, los abre y les manda la orden de ser impresos.
viernes, 8 de mayo de 2009
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