Ser defensor de cruzadas imposibles es algo que me motiva especialmente. Sobretodo cuando los argumentos de sus detractores se reducen a algo tan sencillo como que "si es gratis, lo prefiero".
Sí, acertáis, estoy hablando una vez más de la publicidad, la maldita publicidad. Entremos en detalle...
Durante estos últimos años en los que han aparecido las televisiones privadas, las autonómicas, Canal +, Canal Satélite Digital, Vía Digital, Digital +, la TDT y demás medios conductores de la fatídica publicidad, y en algunos casos, también de programación diversa, lo habitual era que determinado programa se pudiera vez solamente en una de esas múltiples opciones entre las que podíamos elegir.
Últimamente, en especial con las series americanas, podemos el capítulo de la semana con pocos anuncios y pausas de menos de 3 minutos en canales de pago como AXN o Fox. Entre unos días y una semana después, podemos ver a través de una televisión en abierto un montón de anuncios, a veces en secciones de más de cinco minutos, y entre medio esos anuncios desfrutar de ese mismo capítulo a trocitos.
Verlo de esa manera supone no tener que estar suscrito a una oferta de televisión de pago, como Digital +, ONO o Imagenio, y por supuesto, para disfrutar convenientemente de esa opción se aconseja que en el lugar de trabajo habitual no tengamos enfrente a alguien que sí que tenga tele de pago y se regocije explicando el capítulo en cuestión a sus compañeros a la mañana siguiente de haberlo visto.
Pero lo que sí resultaba impensable hasta hace poco era poder disfrutar de la retransmisión en directo de un mismo evento en dos cadenas distintas. No recuerdo si fue primero la Fórmula 1 o el fútbol, pero el caso es que ya hace meses que podemos ver las carreras de Fórmula 1 de manera simultánea en TV3 y en Tele 5, y el partido de interés general(BOE) en las autonómicas y en la Sexta.
Por cierto, hago un pequeño inciso para comentar que la Sexta emite los partidos de fútbol en cuatro idiomas a través de TDT, al parecer era una de las condiciones para tener la exclusiva del partido de interés general. Pero este despliegue técnico como gesto de comprensión por la diversidad lingüística sólo lo hacen en susodicho partido, hoy domingo por ejemplo están dando un partido pero sólo se puede oir al Montes y sus secuaces hablando en español...
Hilando aún más fino, hemos podido ver el mismo evento en directo en dos canales distintos, uno de pago y otro gratuito. Han sido unos pocos partidos de Champion's League, la final seguro, y no recuerdo si alguno más, pero unos pocos días al año podemos elegir entre ver gratis o pagando el mismo evento.
Pero el caso que me ocupa es otro más curioso. Ya ha pasado con Wimbledon y ha vuelto a pasar con el Open USA. Por primera vez en mucho tiempo, hemos podido ver el mismo evento gratis o pagando en televisiones que pertenecen al mismo grupo mediático. En este caso, Cuatro y Canal +, ambos canales de Sogecable, emitían los partidos de Rafa Nadal.
Espero que cunda el ejemplo y deseo que en un futuro esto sea un modelo de negocio viable; una cadena compra los derechos de un evento, y lo emite en directo, gratis y con anuncios en un canal, y sin anuncios y con comentaristas más competentes en otro canal, éste obviamente de pago.
Ojalá sea así, y ojalá los comentaristas sean algo más bordes que los de Canal +, y nos digan algo como "y ahora, mientras ponen los anuncios en Cuatro, vamos a comentar cómo va el partido, que seguramente es lo que quieren nuestros espectadores, en vez de tragarse anuncios de coches, comida que no necesita cocinarse e invitaciones a enviar un SMS para hacerse rico".
The Big Borde espera que un día podamos pagar por no ver publicidad. Y que eso no impida al que lo prefiera, ver algo sin rascarse el bolsillo y pagarlo viendo anuncios.
domingo, 14 de septiembre de 2008
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